ENEMIGAS Y ALGO MÁS

Oh genial xfin la continuacion!! Soy fiel seguidora d tus historias (recuerda: la q le gusta las peleas para q despues se reconcilien  xd) Esa sascha m da mala espina entendi q le hizo daño a lena y tb a yulia, ahora viene a fregar mas la relacion q tienen yulia y lena
Si yulia sabe como fue ella,no le deberia hacer caso pero seguro caera x despecho. Ojala q lena le d pelea y la saque de sus vidas.

Oh pero que capítulo más interesante, me encanto dios valió la pena tanta espera gracias, esos dos nuevos personajes me dan mala espina estoy segura que causarán algunos problemas pero bueno esto hace que la historia se ponga aún más interesante, estaré esperando el próximo capítulo con ansias te envio un abrazo saludos!!!

Hola
me encantaron los dos capítulos
pobre Lena por lo que Yulia ya no le quiere hablar pero creo que lo tenia merecido ya que Yulia siempre le rogo y las cosas ni pueden ser siempre así
lo de la estafa no me lo esperaba que tiene que ver con la vida de nuestras protagonistas una porque es del papa de Lena y una por que de la propia Yulia
y hay va le duda será Inessa o Sasha o Vladimier
los que tengan que ver en esto porque es muy rara su aparición no? o puede ser ese tipo que trato de propasarse con Elena que Yulia la protegió aunque no lo creo ya veré quien fue el responsable
espero pronta la sgte capitulo
escribes muy excelente

Ahhhhhhhhhh -suspiro- al fin la larga espera valio la pena ya tenemos el fic dnd muchs lo queriamos genial pei ya t extrañaba mucho... ahora ansioooooooo demasiado leerlo y q las cosas se traten d calmar entre estas 2 mujeres q siento merecen ser bofeteadas jajajajaja ok no... q gusto q ya pueda leer

que pasara quien encontrara a Yulia Pei podrias postear tu fic obsecion peligrosa el engaño por favor lo quiero volver a leer ya que el foro de tatu news no va a volver mas siiiiii

Saludos Pei!
Como siempre gracias por tu gran trabajo!:-) :-D

Wow, que capítulos tan geniales! Te esperamos pronto, saludos

Porfa no me tortures con tanta espera nesecito la conti... La estoy esperando con unas ansias locas Pei no me hagas esperan tanto por favor

Ok, ahora sí, me registré exclusivamente para leerte y comentar
Ya pue la conti, estoy que entro a diario y nada

Peiiiiiiii no me castigues pon la contiiiiiiiiiiii

Peiiiiiiiiii donde estaaaaasssssss?????? Queremos conti por favoR!!!!

Conti. me estoy quedando sin uñas.

Alguien tiene el wasap de Pei??

Solo el correo tengo :C y de vaina

Porque desapareció el tatunews?

Se que me he tardado, pero el tiempo no me daba. Les dejo triple continuación por la paciencia, espero que lo disfruten.
candyelizabeth: En cuanto pueda prometo comenzar a subirla.


LIV
VLADIMIR KUZMIN

El amor es ciego y la esperanza oscura.

Elena no emitió ni un movimiento mas después de haber pronunciado aquel nombre que tantas cosas removía en su interior. Los nervios, al igual que la furia, se apoderaron de ella haciéndola temblar, el corazón latía agitado y podía sentir el pulso fuerte en su sien. La sensación rara que tuvo durante toda la mañana, no se comparaba en nada a lo que estaba sufriendo actualmente.

-Después de todos estos años ¿ni un saludo si quiera?-pregunto abriendo los brazos con cinismo. El dolor parpadeo en el pecho de Elena trayendo con rencor al pasado, teniendo aquellas mismas sensaciones como si estuviera viviéndolas nuevamente.
-Señorita Katina…-pronuncio Irina queriendo llamar su atención. La situación le resultaba muy incómoda, además su jefa no le quitaba la mirada a aquel desconocido, sus ojos no reflejaban más que odio, y aunque ella había sido testigo de muchas miradas frías por su parte, jamás había visto esa mirada. No quería estar ni un segundo más ahí dentro.
-Tranquila-dijo el hombre dirigiéndose hacia ella- la señorita Katina y yo tenemos muchas cosas de que hablar, puedes retirarte- Irina no esperaba obedecer a aquel sujeto en lo más mínimo, pero cuando espero alguna objeción por parte de Elena, ésta nunca llego. Seguía congelada en su asiento sin apartar la mirada del tal Vladimir como había pronunciado.
-Sólo llame si necesita algo-dijo tomando su silencio como permiso para retirarse-lo que sea-remarco. Le lanzo una última mirada a ambos por si algo sucedida y después se marcho tan rápido como sus pies disimuladamente se lo permitían.
-¿Cómo te atreves?-pregunto Elena levantándose. Sintió sus brazos débiles cuando los apoyo sobre su escritorio- ¿Quién te crees que eres para venir a ordenar a mi personal?-la rabia comenzaba a fluir y ella permitió que la consumiera- ¡vete de aquí Vladimir! ¡Vete antes de que te haga echar como el perro bastardo que eres!-
-Si fuera tú cambiaria ese tono conmigo-advirtió poniéndose serio-
-¡No vengas a darme ordenes!-grito- ¡nada tienes que hacer aquí! ¡Salte de mi oficina ahora mismo!-
-¿Tu oficina?-pregunto riendo. Avanzo unos pasos hacia ella y Elena se quedo donde estaba, retroceder seria dar muestra de miedo y eso era lo último que quería hacer- he estado haciendo una que otra averiguación Lena, y todo sigue como antes-sonriendo- cada rincón de éste lugar está a mi nombre, no puedo creer que sigas siendo la misma inepta de siempre ¿es que no te he enseñado nada?-
-Tú no pusiste un centavo por esto-contesto- que esté tu horrible nombre en los papeles no significa que todo esto te pertenece-
-Legalmente hablando si-dijo- veo que sigues siendo la misma niña torpe-negando- puede ser que hayas tenido todos los medios, pero no tenias la inteligencia suficiente para triunfar, siempre confiaste tan ciegamente en mi. ¿Sabes? Me sorprendí mucho cuando me entere que no cambiaste los papeles, me pregunto qué significara eso ¿Estabas esperándome, Lena? ¿O es que nunca pudiste olvidarte de mi?-
-¿Por qué regresaste Vladimir?-pregunto con la respiración agitada. Estaba removiendo viejas cicatrices que volvían a abrirse-¿quieres quitármelo todo?-
-Vine para que me hagas un pequeño préstamo, Lena. Siento decepcionarte si pensaste que regresaba por ti-contesto sonriendo- bueno, en realidad no es tan pequeño, pero para ti si lo será. Veras que ni cuenta te darás-
-¿No te fue suficiente aquel dinero que me robaste una vez?-
-¡Ah! Ese dinero, veo que todavía lo recuerdas-contesto- veras, ese dinero fue invertido muy bien, siento jamás haberte dado las gracias por eso. Pero verás, me han dado una mala jugada y digamos que necesito una cifra que vuelva a remontarme. Deberías sentirte bien, fuiste la primera persona en la que pensé-
-Estas muy mal de la cabeza si crees que voy a darte un centavo-contesto fríamente- no sé cómo te atreviste a pensar si quiera que voy a ayudar a una escoria como tu-
-Lena, Lena-tarareo acercándose a ella- es gracias a mí que tienes todo esto, lo que sabes, lo que has logrado. Tú ni siquiera fuiste capaz de inventarle un nombre a tu propia revista, si no fuera porque estaba contigo hoy no serias nadie ¿hace falta que te lo recuerde?-
-Simplemente porque me ayudaras al principio no te da todo el crédito, imbécil-respondió- y tu no me has enseñado todo lo que hoy se, sino que fueron los años de experiencia-
-Vaya ¿Qué son esas contestaciones?-pregunto Vladimir sorprendido- ¿el carácter de quien estas imitando? Tú no eres así-negando-
-Ya no queda nada de la niña estúpida que conociste, Vladimir-contesto- y no estoy imitando a nadie, esto es lo que soy. Es lo que he aprendido a ser durante este tiempo y así me va muy bien-
-A mi no me engañas-dijo llegando a ella- te observo y sé que sigues siendo la misma de siempre-intentando tocarla-
-¡Aléjate de mi!-apartando su mano- ¡ni siquiera te atrevas a tocarme!-grito- no tengo tiempo para escuchar mas estupideces, así que márchate ahora mismo si no quieres que te saquen de aquí como mereces- Elena intento apartarse, pero Vladimir era más alto, mas fuerte y la sujeto como si nada
-Te dije que cuidaras tu tono conmigo-sujetando sus brazos- puedo dejarte sin nada Lena, no me provoques. Hagamos esto fácil, solamente es una cosa la que quiero de ti y me la darás ahora mismo-
-Ni creas que…
-¡Cállate!-zamarreándola- ¡Deja de llevarme la contraria y cállate de una buena vez!-grito. Elena abrió grande sus ojos y se calló al instante. A estas alturas no sabía hasta donde era capaz de llegar Vladimir, y honestamente no quería averiguarlo- deja de actuar como si fueras una mujer fuerte que no te queda-dijo observando el miedo que intentaba ocultar en sus ojos- ahora vas sentarte y escucharas todo lo que te diga sin interrupciones ¿está claro?- Vladimir no espero una respuesta. Llevo a Elena hasta su lugar haciendo que se sentara, no había dicho ni una palabra, simplemente se limito a mirarlo con odio- ¿vas a interrumpirme?-
-No-respondió con desgana. Quizás lo mejor era que dijera lo que tenía que decirle para que todo terminara rápidamente-
-Bien-tomando asiento- supongo que te habrás dado cuenta que me he marchado de Moscú-comenzó- con el dinero, o mejor dicho tú dinero-aclaró- abrí una pequeña empresa en Perm, si bien no se compara en nada con lo que tienes aquí, era algo en lo que no me iba para nada mal. Estaba pasando justo en mi mejor momento cuando un imbécil me robo bastante dinero, perdí mucha confianza por parte de mis clientes y por ende, comencé a tener una mala reputación con respecto a mi trabajo. Necesito arreglar muchas cosas y eso va a costarme bastante, si dejo que el tiempo corra para seguir perdiendo clientes estaré caminando directo a la quiebra y no quiero eso. Mis fondos están siendo muy limitados ahora mismo y pronto se acabaran-termino de explicar. Elena ahora entendió su para nada grata presencia y su desesperada necesidad, solamente ella era la única que podía sacarlo de una inminente ruina y disfruto de eso.
-Así que dependes de mi-disfruto pronunciar aquellas palabras- solo dime una cosa Vladimir ¿Qué te hace pensar que voy a estar dispuesta a ayudarte?-
-Veo que sigues sin entender-pronuncio parándose- esto es fácil Lena, yo pierdo, tú pierdes-llegando a su escritorio- ¿en que puede afectarte a ti que me des una considerable suma de dinero? Sabes que tengo razón cuando digo que puedo dejarte sin nada, sea de tu agrado o no, todo esto sigue teniendo mi nombre. No hagas esto mas difícil, se que disfrutas de estar sentada en tu trono y que nadie te quite de el-comento- ¿sabes? Disfrutaría muchísimo venderle la revista a alguien que sea de tu competencia, podrás ver como esa persona se encargara de que nadie la recuerde el día de mañana ¿es eso lo que quieres, Lena?-
-Por supuesto que no-
-Entonces deja de darle tantas vueltas al asunto-contesto- no tengo ningún interés en esta revista, a menos que sea para sacarle provecho, claro. Te estoy dando la oportunidad de que puedas elegir ¿Qué me dices?-
-No sabes cuánto te aborrezco Vladimir- admitió con asco-
-Sí, bueno, me decepcionarías si así no fuera-contesto- hay algo que siempre me he preguntado Lena, dime una cosa ¿durante cuánto tiempo me lloraste? Espero que haya sido digno- Elena decidió ignorar la pregunta. El no tenía idea de cuánto dolor traía que le recordara eso, pero bajo ninguna circunstancia iba a revelar aquello que solamente ella sabía. Saco su chequera y comenzó a escribir rápidamente, la mano le temblaba y no veía la hora de que todo terminara. Aunque algo le decía que no iba a ser tan fácil
-Toma y lárgate ahora mismo-dijo dándole el cheque.
-Que considerada-dijo el leer la suma- como siempre, es un placer hacer negocios contigo, Lena-tendiendo su mano. Vladimir rio cuando no fue correspondido y decido bajar su brazo- voy a dejarte en paz… por ahora-dijo antes de girarse. Elena observo cómo se marchaba y quedaba sola en su enorme oficina.
¿Cómo es que se había olvidado de hacer eso? Maldijo una y otra vez, siempre busco excusas para no cambiar las cosas a su nombre, eso siempre le traiga recuerdos y ella era demasiado cobarde como para hacerles frente en aquel tiempo. Se encargo de recordarle lo ingenua que había sido y eso no trajo más que odio a sí misma, ojala hubiera sido lo que hoy era. No tenía nada que agradecerle, ni siquiera tenía una idea del daño que le había hecho, y apenas su traición había sido el principio.
Elena, envuelta en un mar de sentimientos que la dejaban desamparada, solamente pudo explotar de aquella única manera en la que durante tanto tiempo se había negado. Escuchar sus propios sollozos incrementaba de alguna manera al siguiente, y de repente, ya no podía detenerse.

* * * * * *

-¿Yulia, necesitas dinero?-pregunto Oleg preocupado- sabes que vamos a estar para lo que necesites hija-
-No es eso, papá-respondió suspirando- con Aleksei estamos buscando al responsable o los responsables, lo único que no dependerá de mi es lo que van a decir respecto a mi reputación-
-¡Solo eran calumnias!-exploto Larissa- no sé cómo se atrevieron a hacerte eso, cariño-acariciando sus cabellos- pero como dijo tu padre, cualquier cosa que necesites estaremos contigo-
-Y gracias por eso-tomándola de la mano- pero lo único que tengo para hacer ahora es esperar, si los medios llegan a saber algo de esto estaré perdida-
-¿Y ya has buscando a otra imprenta?-
-Solo visitamos algunas con Aleksei y todos se han negado-
-Esto es increíble-murmuro Oleg enojado- déjame hacer algunas llamadas a mí, van a escucharme-levantándose-
-Gracias papá-observándolo-
-¿Hay alguna otra cosa que te preocupe, Yulia?-
-¿Por qué lo preguntas?-
-No lo sé, parece como si te estaría preocupando algo mas, puedes hablar conmigo si quieres-
-Mama, mi revista está en juego ¿Qué más podría preocuparme a estas alturas? No hay nada que me importe más que poder salir de este agujero.
-Si tu lo dices, escúchame- acercándose más- Yulia, se que ahora estarás concentrada únicamente en poder salir adelante ¿Por qué no hablas con tu padre acerca de la empresa? No puedes con ambas cosas, a ti no te gusta-
-¿Y dejarla en manos de quien, mamá?-pregunto- además, hay mucha gente que esta ayudándome, fue papá quien se encargo de eso. Aleksei me ayuda con la revista, el siempre puede quedarse en mi lugar cuando no estoy-
-Pero no eres feliz, puedo verlo en ti-contesto mirándola- ¿abandonaras por lo que has luchado tanto por algo a lo que te sientes obligada? Tu padre ya no tiene necesidad de trabajar, podrían darse una vida más tranquila, no entiendo porque son así-
-Y yo tampoco lo sé, madre-respondió sinceramente- puede parecerte tonto, pero algo me dice que debo hacerlo, es pero siento que algo sucederá y necesitamos estar bien-
-Por Dios Yulia, no me asustes-
-No me hagas caso, es una tontería-respondió levantándose- tengo que irme ahora, dile a papá que si consigue la aceptación de alguna imprenta me avise-
-Así será-abrazándola- vera que todo se solucionara hija, podrás salir de esto-besando su frente-
-Yo también lo espero mamá-suspirando-

Yulia se marcho rápidamente de la casa de sus padres y observo la hora, aún estaba a tiempo. Aleksei dijo que iba a pasar por ella porque tenía algo importante que decirle, pensaba que eran buenas noticias con respecto a la revista, así que sin perder más tiempo se marcho a su penthouse para cambiarse apropiadamente.
Su hermano no le había demasiado detalles con respecto a dónde irían, pero supuso que iban a hablar con alguien importante si él iba a pasar por ella para tener una cena sorpresa, como el mismo la había definido. El celular de Yulia sonó y supo que Aleksei estaba esperándola abajo, fue por un abrigo y se marcho. Sasha le había dicho que visitaría al supuesto familiar enfermo, aunque no le había contado mas nada luego de lo que había sucedido en el restaurante, Yulia no podía evitar tener dudas. Apenas esta era la primer noche que ella se marchaba diciendo eso, se suponía que la única razón por la que estaba de regreso era esa ¿Por qué pasaba todo el tiempo con ella si estaba preocupada por otra persona? Iba a tener que investigar muy bien todo, no quería que la historia vuelva a repetirse.

-Justo a tiempo-comento Aleksei abriéndole la puerta. Yulia solamente sonrió y entro.
-¿A dónde iremos?-pregunto acomodándose-
-Eso es una sorpresa, ya lo veras-
-¿Una sorpresa para mí?-
-A eso no lo sé-riendo- pero de que estarás sorprendida, lo estarás-
-Eso me deja con mas intriga ¿sabes?-
-En su momento lo sabrás-fue lo último que dijo Aleksei antes de cambiar de tema. Yulia comprendía que no iba a revelarle nada, así que dejo de insistir con lo mismo. Además, como le había dicho él, en su momento lo sabría.

Miraba distraída por la ventana y en realidad no observaba nada, tenía demasiadas cosas en la cabeza y no sabía cual problema quitarse de encima primero. En cuanto terminara la semana tendría que hacer las fotos para Jean Pierre, esperaba que la situación no sea demasiado incomoda como se la planteaba en su cabeza, tenía una leve idea de lo que la esperaba. El comportamiento de Elena no había sido el esperado aquella última vez que la vio, y estaba segura de que no iba a detenerse ahí, y aunque quisiera sonar indiferente, le intriga sucumbía en ella más de lo que pensaba.
El auto finalmente se detuvo y Yulia salió de sus pensamientos para observar la casa frente a ella, que no era de nadie más que de Katya.

-¿Qué hacemos aquí?-pregunto mirando a Aleksei-
-Venimos a cenar, ya te lo dije-
-A eso lo sé, pero no me dijiste que íbamos a estar aquí Aleksei ¿Por qué me haces esto?-
-¿Y hubieras venido si sabias que era aquí? Por favor Yulia, somos adultos-saliendo del auto-
-Espera, espera-también saliendo- ¿Por qué me estás diciendo eso? ¿Elena también está allí? ¿Es eso?-
-Yulia…
-¡Dímelo Aleksei!-
-¡Sí!-respondió- ¿contenta? Ella también está allí, necesitamos a las dos para hablarles de algo importante. Yulia, no creas que estoy haciéndote esto a propósito ¿sí? Solo piensa-pidió- no te haría pasar por esto si no fuera algo de suma importancia-
-Yo… no lo sé-suspirando-
-Necesito que estés aquí, veras que cuando lo sepas entenderás-dijo- pero preciso que estés conmigo ahora mismo Yulia ¿puedes hacer esto por mi? ¿Un pequeño esfuerzo?-
-Pequeño esfuerzo-repitió en un murmullo- está bien-suspirando- pero vas a deberme una muy grande después de esto-
-Gracias-sonriendo- como si fuera que no la veras dentro de unos cuantos días-
-Pero mientras tanto quería evitarme cualquier tipo de incomodidad-
-Andando-tomándola de los hombros- se me hace que evitas otra cosa-riendo-
-Si quieres que me comporte comienza tú primero-contesto. Apenas estaban llegando a la puerta cuando una sonriente Katya salió a recibirlos
-Justo a tiempo chicos-sonriendo- hola, Yulia-saludándola- me alegra que hayas podido venir-
-Hola Katya-respondió- bueno, la información no fue la mejor, pero al menos ya estoy aquí-
-Ya veo-murmuro. Observo que Aleksei sonreía nerviosamente y capto la indirecta de la morena- tú y yo luego hablaremos-
-Cariño…
-Pasen-lo interrumpió. El rubio lo hizo silenciosamente y Yulia escondió su risa lo mejor que pudo, hasta que claro, llegaron al comedor y su sonrisa se borro en cuanto observo a Elena pararse e ir hasta ella
-Buenas noches Elena-saludo Aleksei primero. Yulia sabía que lo hacía por ella- que sorpresa, así que fuiste la primera en llegar-
-Katya me dijo que era urgente así que no lo dude dos veces-respondió mirando especialmente a Yulia-
-Y como siempre la misma exagerada-respondió Katya- ¿Por qué no se sientan? No falta mucho para que ya esté la cena, voy a estar en la cocina-
-Te ayudo- dijo Aleksei siguiéndola-
-Aleksei…-murmuro Yulia. El rubio solamente giro para guiñarle un ojo y seguir como si nada. La morena maldijo al traicionero y fue a sentarse en completo silencio
-Hola Yulia-dijo Elena sentándose a su lado. La morena suspiro intentando tener la mayor paciencia posible esa noche- fue una total sorpresa todo esto ¿cierto? Supongo que a ti tampoco te han dicho porque nos han invitado-
-No Elena, sinceramente no tengo ni la más remota idea-respondió sin mirarla-
-Pero… ¿ni siquiera te das una noción?-
-No-
-¿Te sucede algo?-
-Pues si-respondió observándola- me sucede que yo no puedo hacer como si nada al igual que tú ¿podrías ser menos cínica?-pidió- hace días ni siquiera podías verme cerca, y tampoco voy a preguntarte cual es la razón por la cual estas hablándome ahora, solo hablaremos lo justo y necesario y va a ser en presencia de nuestros hermanos-
-¿Y por qué debería hacerlo?-
-Las razones son claras, Elena-dijo- así que si me disculpas, voy a pedirte que me des un respiro. Fuiste muy franca con respecto a eso y sobre todo la última vez que nos vimos-
-Yulia, yo…-intento decir- puedo asegurarte que siempre ha habido una razón en mis actos, solamente te pido que me escuches. Hay muchas cosas que debes saber, y sobre todo de Sasha-dijo rápidamente- ¿Por qué estabas con ella Yulia? ¿A caso tienen…?-sin poder terminar de admitirlo-
-¿Qué tiene que ver Sasha en todo eso?-pregunto confusa- no entiendo tus juegos Elena, de verdad que ya no-
-Yulia-tomando su mano- por favor, debes ser sincera conmigo ¿Quién es Sasha en tu vida?-pregunto observándola a los ojos. Yulia pudo ver más que una simple pregunta en sus ojos, la mano de Elena temblaba sobre la suya y ella no comprendía el por qué. La pelirroja se acerco mas a ella cuando abrió la boca para contestar, pero sinceramente no había una respuesta concreta ¿Cómo es que Elena la conocía? ¿Qué tenía para decirle de ella?
-Hola, hola-pronuncio Katya entrando. Deposito la fuente en el centro de la mesa y sonrió cuando observo sus manos juntas sobre la mesa- espero no interrumpir nada-
-Creo que si lo hemos hecho, Katya-dijo Aleksei riendo-
-No hicieron nada-respondió Yulia aclarándose la garganta. Se sorprendió cuando Elena no había quitado su mano, aún así cuando estaba siendo observada sin disimulo por parte de los otros dos, decidió quitar su mano, la pelirroja la observo como reprochándole el distanciamiento por aún así no dijo nada, al menos no con palabras.
-Aleksei ¿Podrías ir por Ekaterina? Seguramente debe seguir encerrada en su habitación-
-Está bien-asintió. Katya comenzó a servir la comida completamente consciente del silencio que se había formado, pero sonrió cuando la idea de que había interrumpido algo justifico aquello.

Aleksei llego con la pequeña poco tiempo después y la sentó en su lugar. Al principio las conversaciones eran algo forzadas y solamente la feliz pareja eran quienes la iniciaban. Katya comento el problema con la empresa de su padre y como había logrado solucionarlo rápidamente, el rubio sin poderlo evitar, y además de que ya le había comentado algo a su novia, relató cómo iban las cosas en la revista.

-¿Estafa?-pregunto Elena sorprendida- pero ¿Quién fue?- Yulia acribillo a Aleksei con la mirada y siguió comiendo-
-Obviamente alguien que trabaja para nosotros, bueno, para Yulia-aclaró- pero todo va avanzando, supongo que mañana ya podremos tener noticias acerca de quién pudo haber sido-
-Eso no les trajo problemas ¿verdad?-pregunto Katya- porque hasta que no se supo en la empresa lo que nos había hecho, todos pensaban que nosotros estábamos haciendo un fraude-
-No es nada que no tenga solución-intervino Yulia- en cuanto tengamos al responsable haremos lo que se debe y todos contentos- relato dejándolos confundido a todos-
-Pero ¿nadie se ha quejado?-pregunto Katya-
-Solo algunas demandas-contesto bajo-
-¿Cómo?-
-Solo algunas demandas-repitió-
-¿Solo algunas?-pregunto Elena-
-Yulia ¿está todo bien?-pregunto con preocupación Katya-
-Tranquila, apenas nos hemos enterado de esto hace dos días. Nos guiaremos de la supuesta estafa y veremos quien intervino en los contratos, solamente es cuestión de encontrarlos y ya. Todo mi personal sigue asistiendo al trabajo como siempre, así que suponemos que no intuyen de que ya sabemos-
-Buena suerte con eso-deseo Katya- espero que lo encuentren rápido, quien estafo a papá ya ni se encuentra en el país-
-Por eso esperamos tener noticias mañana-dijo Aleksei- además, si el sujeto huye, cavará su propia tumba. Nos hará las cosas más fáciles de alguna manera y haremos que nos devuelva todo-
-Si aún tiene algo consigo-respondió Yulia sirviéndose mas vino- ¿alguien quiere?-pregunto. Tanto Aleksei como Elena acercaron sus vasos y la morena los sirvió- ¿tú no quieres, Katya?-pregunto al ver su copa vacía.
-No gracias, no voy a beber esta noche-sonriéndole a Aleksei que correspondió. Yulia siguió como si nada, pero fue Elena quien no quito la vista de aquellos dos mientras seguían en su mundo. Estuvieron un rato conversando acerca del asunto que se había vuelto interesante hasta que la pequeña Ekaterina se quejo de que quería el postre- iré por el-dijo Katya levantándose.
-Aprovechare para ir al baño entonces-dijo Yulia parándose. En cuanto llego se refresco el rostro con agua, esperaba que todo resultara tan fácil como lo había contado. Últimamente había tenido demasiados gastos, todavía tenía que indemnizar y ni hablar de encontrar otra imprenta. Lo más seguro es que tendría que poner dinero de su bolsillo, pero si no había revistas, no había ganancias. Tenía que pagar a las modelos, a los diseñadores, arrugo su frente sabiendo que sin las ganancias aquello no iba a ser tan fácil. Dependía ahora más que nunca de su revista y estaba dispuesta a todo para que no siguieran manchando su nombre.
Observo su rostro frente al espejo, puso mejor cara y en cuanto estuvo seco, salió encontrándose con Elena esperando en la puerta- ¿Qué haces aquí?-
-¿No te das una idea?-pregunto acercándose-
-La verdad que no, necesito pasar-queriendo salir-
-No-deteniéndola- no hasta que tenga lo que he extraño estos días-dijo antes de besarla. Elena acorralo a Yulia contra la pared para dejarla sin escapatoria, la morena lejos de resistirse, solamente atino a sujetarse de aquel cuerpo. La pelirroja se había colgado de tal manera de sus hombros que parecía no querer nunca despegarse. Yulia no pudo evitar exhalar al contacto con sus labios, negar que ella no había extrañado aquella boca sería una traición contra ella misma. El beso siguió formándose con cada movimiento lento y húmedo, el encuentro dejo chispas en la mente de ambas con dos corazones palpitantes que volvía a encontrarse- soy mejor que ella-escucho mencionar a Elena sobre sus labios- puedo ser mejor que ella-antes de volver a besarla- y ser la única- Yulia recordó sus propias reglas y logro apartarla
-Basta-empujándola- ahora entiendo porque haces esto, no es concurso Elena-
-Tú no entiendes-respondió- no tienes ni la más mínima idea de lo que es, y quiero que sepas desde ahora que no pienso parar hasta quitarla del camino. Tenemos que pasar mucho tiempo juntas Yulia, te guste o no-
-Sera insoportable-confesó sin pensar. Fue hasta ese momento que Yulia logro ver algo en los ojos de Elena ¿desesperación? ¿Temor? ¿Qué había en ellos aquella noche en particular? Parecían algo rojizos en hinchados ¿había dolor? Había mucho para suponer, pero era la primera vez que veía algo así, y por supuesto que nada tenía que ver con alegría. Se sintió culpable cuando la observo con un brillo de tristeza al escuchas sus palabras, tampoco quería lograr eso, debía escapar antes de que rompiera cualquier pauta- simplemente sigue con tu vida Elena-dijo marchándose rápidamente.
-No pienso ceder, Yulia. Abre tus ojos-escucho a su espalda.

En cuanto todos estuvieron en la mesa nuevamente, nada volvió a ser lo mismo. Yulia estaba en silencio preguntándose que quería decir Elena con todo lo que había dicho, no creía tampoco que le vaya a inventar alguna mentira, sabía que no era así, pero a estas alturas era difícil confiar en su palabra.
Elena no había quitado la mirada de la morena, sabía que había sembrado la duda pero apenas aquello era el comienzo, necesitaba tener a Yulia completamente de su lado antes de contarle absolutamente todo, estaba a dispuesta a ya no callar mas.

-¿No crees que ya es tiempo, cielo?-pregunto Katya.
-Si tu lo crees así, pues yo te sigo-menciono Aleksei. Tomo a la pelirroja de la mano y ambos se levantaron bajo la mirada curiosa de tres pares de ojos- supongo que se preguntaran a que se debe todo esto y porque las hemos invitado a cenar, y verán que nos complace mucho dar esta maravillosa noticia que será dicha en breve-
-Pensé que iba a morirme con la intriga-menciono Yulia haciendo reír a Katya
-Aleksei deja de dar tantas vueltas-dijo risueña- deben estar que no pueden con su curiosidad-
-Está bien-rindiéndose- te concedo los honores- poniendo una mano en su vientre. Katya colocó la suya encima y sus ojos brillaron emocionados
-Estoy embarazada-anuncio-

LV
SIEMPRE NOS QUEDARA PARÍS


Me golpeo… y se sintió como un beso.




-¿No es genial?-pregunto Aleksei sonriendo. Yulia estaba con la boca abierta aún procesando la noticia, la pequeña Ekaterina aplaudía y festejaba la llegada de su nuevo hermanito y Elena se paraba y veía todo en cámara lenta.
-Katya…-murmuro yendo hacia ella.
-Estoy tan feliz, hermanita-confeso emocionada. La pelirroja no hizo más que abrazarla aún con la sorpresa dibujada en su rostro-
-Yo… ¿estás segura de…?-
-Completamente-la interrumpió- aquí están las pruebas-dijo dándole el sobre. Elena lo leyó y levanto la vista con una media sonrisa- serás tía por segunda vez-
-Oh Katya-volviéndola a abrazarla- felicidades, discúlpame, es que ha sido tan inesperado que…
-No te preocupes-la tranquilizo- sabia que tendría que haberles dado un adelanto, pero decidimos que era mejor así-sujetando la mano de Aleksei.
-No queríamos arruinar la sorpresa-aclaro el rubio-
-Felicidades, Aleksei-dijo tendiendo su mano- espero que tengas una noción de todo lo que esto significa-
-¡Elena!-le reprocho su hermana-
-Alek…-murmuro Yulia saliendo de su shock. Se levanto y fue recibida por un fuerte abrazo por parte de su hermano- ¿voy a ser tía?-pregunto con la voz temblorosa-
-Serás tía-aseguro abrazándola mas fuerte- será papá, Yulia-dijo emocionado. El abrazo duro un determinado tiempo hasta que por fin se separaron y la morena también felicito a Katya.
Las preguntas iban desde qué momento se habían enterado y como habían sospechado, si bien al principio Elena se mostro algo reticente supo tranquilizarse al ver que Aleksei se veía feliz y en ningún momento se apartaba de su hermana. Al parecer este no iba a abandonarla.
El ambiente volvió a tranquilizarse y la atención se concentro en el nuevo integrante que estaba apenas formándose.
-Aún falta avisarles a mama y a papa, pero ya veré ese asunto luego-informo Katya-
-No te olvides de nuestros padres, tonto. Mamá no va a perdonártelo- dijo Yulia a su hermano-
-Por supuesto que no, en cuanto menos se lo esperen les avisare-
-Mañana mamá regresara-dijo Elena- si quieres puedo traerla y le dices, de paso conocerá a Aleksei-Katya sabía que estaba acorralando al rubio para involucrarlo mas con todo lo que estaba a punto de venir. Asintió y dejo que su hermana hablara, después de todo tenía razón, no podía juntar a sus padres para darles la noticia a ambos.
La conversación duro un poco mas hasta que la morena decidió marcharse, Elena dio un último intento al probar su suerte pero fracaso. Yulia le había lanzado una mirada que la había dejado en su lugar, una mirada que le recordaba a todo lo que había hecho ella anteriormente. Suspiro resignada y dejo que se marchara sola, solamente era cuestión de días para que ambas estuvieran a solas en la sesión y ese era el momento perfecto para actuar.

REVISTA DE MODAS “VOLK”


Yulia se había despertado temprano en la mañana con el sonar de su celular, su abogado le había dado la maravillosa noticia de que ya tenía a todos los responsables bajo su cargo correspondiente en cuanto Aleksei le había pasado la información. Tania a la policía puntual esperando en la puerta para hacer su trabajo, el día no podía comenzar de una manera mejor.

-Cuando quieras, Yulia-dijo el hombre- veras que le haremos pagar cada problema que te han causado-
-Estoy segura de eso-asintió- Aleksei ¿Podrías encargarte tú?-
-No hay problemas-dijo levantándose- síganme caballeros, les mostrare quienes son-dirigiéndose a los policía. Apenas eran tres los responsables, Yulia aún no podía entender como solo tres personas codiciosas había logrado afectarla de aquella manera indirecta. Ella se quedo en su oficina ahora vacía esperando. Deseaba que los ladrones tuvieran su merecido, sinceramente no esperaba la devolución de todo lo que le habían quitado, solamente era una cifra, simplemente quería que se hiciera justicia. El dinero siempre iba y venía, aunque ella estaba más perdiéndolo que otra cosa.

* * * * *

Inessa observo a su hija una vez más y no pudo opacar su intuición de madre, Elena no había hablado demasiado desde que la había pasado a recoger al aeropuerto. Sabía que algo la preocupaba y ella esperaba paciente a que se desahogara con ella, pero parecía que su silencio iba a extenderse quizás para siempre y ella siempre dijo que los problemas había que sacarlos para afuera y ahí eliminarlos.

-Has estado callada, hija-señalo- ¿Hay algo malo?-
-No es nada mamá-contesto. Inessa ya esperaba esa respuesta y no tenía ni un pelo de tonta. Era obvio que algo le pasaba.
-Entonces avísale a tu rostro-dijo- porque déjame decirte que gracias a él no puedes mentir y mucho menos a tu madre-
-¿Iras a algún lado?-pregunto cambiando drásticamente de tema. Decidió resignarse y esperar a que ella por si sola se desahogara, tal cual como lo había dicho aquella vez. Seguramente seguía con su problema de amor y eso, de alguna manera, la dejo más tranquila.
-Tengo que pasar a recoger el contrato de mi nueva casa-anuncio feliz. Elena rodo los ojos- y no quiero llegar tarde, además estaba por ir a ver unos muebles, necesito dejar mi casa impecable-
-Veo que estas apurada-contesto-¿no quieres compañía para ver los muebles?-
-No te molestes cariño-besando su frente- tú tienes tu trabajo y fue suficiente con que me acompañaras en todo esto una vez, regresare cuando menos lo esperes. Aunque estarás en el trabajo, así que nos veremos en la cena-
-Hasta la cena-dijo observando cómo se iba.

Inessa llego hasta donde estaba el servicial chofer ya esperándola, pronunciar el nombre de su destino trajo consigo más de lo que podía cargar. Mientras observaba distraídamente por la ventana y se retorcía las manos, no pudo hacer nada para aliviar su nerviosismo.
Se había encontrado con muchos recuerdos del pasado hace dos días cuando había regresado al que había sido su hogar durante tantos años, quería convencerse de que no estaba tomando una decisión por un simple impulso, a estas altura tenía ya todo superado, simplemente tenia preguntas inconclusas y muchas cosas para decir. El auto freno y ella dio un largo suspiro para tranquilizarse justo antes de que la puerta a su lado fuera abierta.

-Estaré esperándola aquí, señora-comunico el joven. Inessa apenas asintió, estaba demasiado concentrada viendo el enorme edificio que tenia frente a ella.
Por un fugaz momento tuvo ganas de girarse y tener una retirada digna, pero eso sería volver a repetir el mismo error del pasado y ella ya había decidido ponerle un fin definitivo a todo. Con la frente en alto comenzó a ir hacia el interior, aparentando seguridad a cada paso que daba, muy a diferencia de cómo se sentía por dentro.

Inessa observo a su alrededor y noto que nada había cambiado a pesar del tiempo. Así que aprovechando eso, fue directamente hacia el lugar donde sabía que encontraría lo que estaba buscando. Se sintió observaba a medida que iba acercándose mas, quizás algunos podían reconocerla, pero eso no importaba ya. Seguramente conocían su historia o quizás no.
Estaba a punto de preguntarle a la joven que estaba distraída por algunas indicaciones, cuando las puertas a su lado se abrieron dejando mostrar lo que tanto buscaba. No había perdido detalle cuando el hombre quedo estático en su lugar y la observaba con grandes ojos sorprendidos.

-Hola Sergey-

* * * * *

-¿Puedo pasar por ti?-pregunto con timidez- cuando salgas, quiero decir-
-¿Luego de la sesión?-pregunto Yulia colocándose el abrigo- no tengo ni la menor idea de cuánto voy a tardarme, Sasha-
-Puedes enviarme un mensaje cuando estés a punto de salir-sugirió- voy a tener que salir a hacer algunas cosas, de todas maneras voy a estar cerca-
-Entonces en ese caso te voy a avisar-contesto-
-Estaré esperando entonces-acercándose a ella. Yulia no pronuncio nada cuando ella la beso en los labios, después de aquello ultimo que había sucedido entre ellas, Sasha parecía que eso era lo único que se atrevía a hacer.

Observo su reloj una vez y supo que ya era hora de marcharse. La rubia se quedo mirándola de una manera extraña a medida que se alejaba de ella, como si quisiera decirle algo y no sabía por dónde empezar. Yulia sabía que era tiempo lo que necesitaba, pero no estaba segura de tener ya la suficiente paciencia para esperar y saber cuál era la verdadera razón por la que estaba ahí.
Jean Pierre estaba esperándola con una sonrisa en los labios que se agiganto más en cuanto la vio, comprendía que el aún seguramente estaba teniendo dudas de su presencia.

-Viniste-dijo confirmándolo- veras que con esto llegaremos muy alto-
-Esperemos-contesto vacilante-
-Ya verás que si, además…-dijo deteniéndose- mira nada mas, pero que puntuales son-mirando sobre su hombro. Yulia se giro encontrando a Elena yendo hacia ellos con una sonrisa trémula.
-Sabes que la puntualidad es lo mío, señor Pierre-saludándolo-
-Y no me cabe la menor duda-dijo- vengan por aquí-dijo caminando. Llegaron hasta el estudio ya preparado, donde había más personas y un joven preparando su cámara- el es mi alumno Gabriel, espero que no les moleste que el también saque algunas fotos-
-No hay problema-contesto Yulia-
-Genial- exclamo Jean- el vestuario esta en el mismo lugar de siempre, enseguida les avisare a las chicas para el maquillaje, ustedes ya saben el procedimiento-
-¿Tendremos un solo vestuario?-pregunto Yulia incomoda-
-Supuse que no hay ningún problema-contesto el hombre sonriendo- ¿o es que si lo hay?-pregunto. Elena observo en silencio a Yulia, ésta apenas la correspondió por unos segundos y luego negó.
-Ninguna-contesto.

Entraron al vestuario con las maquilladoras pisándole los talones, Yulia suspiro ya que se había salvado de lo que sería seguramente una conversación incomoda. Sentía la mirada de Elena sobre ella quemarla y no sabía si quería salir corriendo de allí y gritar para saber qué era lo que tanto quería.
En cuanto estuvieron listas la morena se cambio lo más rápido que pudo y salió de ahí rápidamente dejándola sola. Elena salió algunos minutos después y la sesión finalmente comenzó.


-Esto será una bomba-exclamo Jean sonriendo- Gabriel encárgate de hacer algunas tomas desde abajo-
-Está bien-contesto obedeciendo-
-Quiero más luz-pidió- ¿Yulia podrías colocar tu mano sobre el hombro de Elena?-pregunto- No, mejor hazlo tú Elena, eso es, magnifico chicas-los disparos no cesaban. Yulia sintió los dedos de Elena acariciarla y no pudo evitar girarse para mirarla- me encanta esa mirada Yulia, sigue así-dijo conforme sin entender nada.
-Yulia…
-Nos están fotografiando Elena-dijo cortando la conversación-
-Elena levanta un poco más la cara, eso es-continuaba sin enterarse de nada- son unas fotos increíbles-afirmo.

Los disparos no paraban. Jean habían encontrado unos sombreros y había insistido en que los utilizaran haciendo las mismas poses. Elena no perdía oportunidad para estar más cerca de Yulia, y la morena, impotentemente no podía decir nada al respecto ya que así se lo ordenaban.
Los minutos corrían y de repente todo el mundo ahí había perdido la noción del tiempo. Elena tuvo que sujetarse de Yulia cuando sintió un débil mareo que le nublo la vista.

-Estás haciéndome pesa, Elena-se quejo moviendo su hombro. Cuando descubrió que la pelirroja no contestaba Yulia se giro encontrándola con el rostro pálido- ¿Estás bien?-
-No-fue todo lo que respondió antes de dejarse caer hacia adelante, Yulia agradeció sus reflejos y la atrapo antes de que cayera al suelo.
-¡Santo cielos!-exclamo Jean Pierre corriendo hacia ella- ¿Qué ha sucedido?-
-Se ha desmayado-pronuncio Yulia- encárgate de traer a algún médico Jean, voy a intentar de despertarla-
-Enseguida-salió corriendo.

Yulia decidió que lo mejor era llevarla al camerino para más privacidad. Recostó a Elena sobre un sofá y puso su cabeza en su regazo, acaricio sus cabellos y espero la llegada de algún médico.

-¿Qué estás haciendo, Elena?-pregunto intuyéndolo. Poco tiempo después apareció el médico e hizo la revisión pertinente y el diagnostico fue todo lo que estaba esperando y a la vez no.
-Falta de alimento-dijo observándola- está débil por eso mismo, quizás también daba hacerse algunos exámenes para saber si tiene anemia. Está demasiado pálida ¿alguien tiene alcohol para despertarla?-
-Ahora traeré-dijo un joven saliendo.

Fue Yulia quien se encargo de hacerlo, Elena los abrió lentamente y ella fue la primera en explicarle lo que había sucedido. Luego de un regaño del médico y muchas preguntas, éste se retiro no sin antes de recordarle los exámenes.

-Chicas yo creo que ha sido demasiado por hoy-comenzó Pierre cuando todos se habían ido quedando solo ellos tres- Elena debe descansar, las fotografías han estado todas excelentes, será difícil escoger ¿estará bien si mañana seguimos a la misma hora?-
-Por mi está bien-contesto Yulia. Elena apenas asintió y se sentó correctamente en el sofá.
-Perfecto, pueden irse cuando quieran. Las dejare para que se cambien cómodas-dijo antes de marcharse.
-¿Ya te sientes mejor?-
-Aún estoy un poco mareada-contesto tocándose la cabeza-
-No estás comiendo Elena-mirándola seria- ¿Por qué?-pregunto. La pelirroja simplemente desvió la mirada-
-Cómo si no fuera obvio-
-No hagas eso-pidió Yulia- deja de afectar tu salud de esa manera-
-Resulta que ahora te importo-parándose-
-Me preocupa lo que estas haciéndote-detrás de ella-
-Yulia-girándose- gracias-abrazándola
-¿Por qué?-pregunto sorprendida. No pudo evitar rodearla con sus brazos y sentir que estaba un poco más delgada
-Por no dejarme caer-respondió. Yulia se pregunto si hablaba de manera literal.
-No me gusta lo que estás haciendo-dijo en su oído. Elena la abrazo aún más fuerte- estás haciéndote daño, Elena-
-Lo sé-respondió mirándola- Yulia…-murmuro acercándose a su cara-
-¿Sí?-observando sus labios
-Déjame agradecerte-pronuncio antes de besarla. Elena sintió alegría renacer en su interior cuando notó que era correspondida, el beso se creaba tranquilo y pausado en aquel camerino. Llevo sus manos hasta los botones de su camisa y comenzó a desprenderlos hasta que sintió otras manos detenerla.
-No-apartándose- basta de éste juego Elena-
-No es un juego para mí, Yulia-acercándose nuevamente- ¿Por qué te niegas tanto?-tocando su rostro
-Porque fuiste tú quien prefirió las cosas así y no puedo perdonarme haber permitido tanto desprecio de tu parte-y ahí estaba la verdad.
-Yulia, no sabes cuánto…
-Tus disculpas no borraran la humillación Elena-alejándose- espero que entiendas esto por las buenas, no me provoques si no quieres que te pague con la misma moneda-advirtió. La pelirroja quedo muda observando como Yulia tomaba sus cosas y se retiraba. Lejos de ella.
Yulia salió de aquel edificio caminando ligeramente, escapando de una verdad que negaba constantemente con demasiada ímpetu.
Sasha estaba esperándola fuera tal cual como había dicho mediante su mensaje, tenía una sonrisa radiante, y aunque ella quiso corresponderla, solamente lo logro a medias.
-¿Está todo bien, Yulia?-pregunto preocupada
-Claro que si-mintió. Todavía sentía el cuerpo delgado de Elena apretarse junto al suyo
-No lo pareces-
-Nada está mal ¿es tan difícil de creer?-pregunto exasperada. Sasha retrocedió un paso sorprendida por aquel ataque- lo siento, es que…
-Olvídalo-dijo- es obvio que no has tenido el mejor día ¿Por qué no dejamos este paseo para otro momento?-
-Tú querías hacer esto desde hace días-
-Pero puedo esperar, Moscú no va a irse a ninguna parte-contesto- además, ibas a faltar al trabajo por mí y tu situación no es la mejor ahora. Estarás haciendo algo más productivo que estar perdiendo el tiempo conmigo-
-Lo siento mucho, Sasha-
-No hay problema, ven aquí-abrazándola- ¿Ya estás mejor?-
-Algo así-no del todo-

Elena no había tenido mejor momento para aparecer para observar aquello, coloco la mano en su pecho y sintió de nuevo el mismo dolor que últimamente estaba agobiándola. Apretó su puño libre cuando observo la sonrisa de Sasha, aquella misma que quería destruir con sus propias manos, tanto o más como lo había hecho con ella hace tiempo atrás. No pensaba darle más oportunidades, ella iba a abrirle los ojos a Yulia y estaba lista para comenzar ahora mismo.

La morena arribo el auto junto con Sasha, tenía que dejarla primero en el penthouse y luego se marcharía lo más rápido posible a su oficina para ver cómo iban las cosas. Financieramente hablando tenía algunas cosas al límite, sabía que podía sacarle provecho a la sesión, agradecía que Pierre no quisiera también parte de las ganancias, aquello le venía del cielo, aunque tuviera que esperar hasta la entrada de la primavera como habían previsto y para eso aún faltaba.
En cuanto ingreso a su oficina Alexa entro detrás de ella dándole toda una lista de las personas a quienes tenía que indemnizar si no quería tener más problemas y cuentas que agregarle a sus problemas. Yulia leyó y releyó cada cifra y su cara se contraía de dolor, tenía una leve de idea ya de todo, pero la realidad siempre lo superaba todo. Tenía que hacer unos movimientos más que excelentes si no quería echar a la quiebra su revista, y eso sin contar que aún necesitaba una imprenta.

-Señorita Volkova-dijo Alexa entrando nuevamente- la señora Marina Novikova está aquí, quiere hablar con usted-
-No voy a unirme a su revista, que lo entienda de una vez-suspirando-
-Dijo que necesita decirle algo de suma importancia-aclaró- y que también conoce su situación-
-¿Qué?-pregunto- ¡por Dios! ¿Es que nadie puede guardarse nada? Hazla pasar para que diga lo que tenga que decir y se marche en cuanto antes-
-Entendido-contesto Alexa. Yulia fue por un vaso de agua, apenas estaba tragando el líquido cuando observo a la susodicha entrar con pasos seguros
-Buenas tardes Yulia-saludo con una sonrisa impecable- espero no interrumpir nada-
-Para nada-contesto. Marina tomo asiento rápidamente frente a ella y abrió la boca para comenzar cuando ella levanto su mano callándola- escúchame Marina ¿puedo tutearte?-pregunto. La mujer asintió- supongo que nuestro último encuentro no fue el mejor, pero creo haber dejado muy en claro que no pienso unir mi revista con ninguna otra. Un socio es lo último que tengo ahora en mente para preocuparme, ésta es mi revista y soy completamente independiente y así será hasta el final de mis días-
-Entiendo-respondió calmadamente-
-Así que voy a ahorrarte el tiempo desde ya, no me considero lo bastante desesperada como para unir mi revista con otra-
-Bueno, eso no es exactamente lo que tengo entendido-dijo. Yulia levanto una ceja.
-¿Y puedo saber qué es lo que tienes entendido?-
-Tengo entendido lo suficiente como para saber que un mal paso puede costarte tu posición, al igual que tu problema de imprenta-
-Veo que los rumores corren rápido-
-No sé si sean los rumores, pero nosotros sabemos encontrar lo que buscamos cuando queremos-parándose- es por eso que no vengo a proponerte que te unas a nosotros, Yulia. Eso ya es inútil-
-¿No?-pregunto con sorpresa- ¿entonces a que debo tu presencia esta vez?-
-Si regresaba haciéndote la misma propuesta sabia que ante mano que volverías a negarte, es por eso que vengo a ofrecerte ayuda-informo- aunque es más una ayuda mutua, por supuesto. Tomate el tiempo que quieras para leer, si tienes preguntas voy a responderlas-dijo dejando unos papeles sobre su escritorio-
-Espero que esto no sea algún truco, en estos momentos no estoy…
-Es algo que te conviene tanto a ti como a nosotros, y debes saber desde ya que no jugamos-aclaro. Yulia tomo los papeles sin quitarle la mirada de encima, se acomodo mejor en su silla y comenzó a leer tranquilamente.

* * * * *

Elena tamborileó los dedos sobre sus muslos, la impaciencia la estaba matando. Recurrir personalmente a donde estaba por ir significaba lo mucho que esperaba cambiar las cosas, suponía que era un sacrificio y mas viniendo de su parte, y esperaba que sea visto como tal. Bajo del auto y cruzo sus dedos, había dejado muchas cosas por hacer, pero esto valía mucho mas la pena. Observo la entrada del edificio que tanto se parecía al suyo, entro con pasos firmes y la mirada altanera, cada mirada que se cruzaba con la suya lucia con sorpresa al reconocerla. La preguntaba estaba gravada en la cara de todos ¿Qué hacia ella ahí? Eso estaba claro, solamente ella lo sabía. Venía a recuperar aquello mismo que, por ceguera y orgullo había perdido.
Recorrer el mismo pasillo y observar la misma puerta que hace tiempo atrás había cruzado y visto algo que le arrebato muchas cosas, no traía la mejor de las sensaciones. Aún así siguió avanzando sin importar las cosas que llegaban a su mente.

-Señorita, no puede entrar-menciono Alexa percatándose de sus intenciones-
-¿Y por qué no?-
-La señorita Volkova está ocupada ahora-
-Necesito hablar con ella, supongo que no va a importarle una pequeña interrupción luego de que sepa las cosas-dijo confundiendo a la secretaria.

Y una vez más, Elena no había elegido mejor momento para entrar. Todo lo había sentido como un doloroso deja vú.
Yulia se había parado justo para estrecharle la mano a Marina, y en un arrebato de quien sabe que, no había podido evitar abrazarla, la propuesta iba a sacarle un enorme peso de encima y ella no sabía cómo verse lo suficientemente agradecida. Marina lamentablemente no había podido descifrar muy bien sus intenciones, así que pensó que un beso en la mejilla era lo correcto, que por un mal movimiento, había sido dado muy cerca de la boca. Y viéndolo todo desde una perspectiva diferente, eso incluyendo la de la entrada, no podía observarse como tal.

-¡Yulia!-grito Elena invadida con mucha rabia. Avanzo con pasos acelerados luciendo como un volcán a punto de estallar.

Las dos mujeres se separaron rápidamente conscientes de que la inoportuna imagen que daban podría malinterpretarse. Y eso fue exactamente lo que pensó la testigo.

-¡¿Es que nunca tienes suficiente con una?!-estallo- ¡Y luego tienes cara para recriminarme cosas a mí!
-Elena nada es lo que parece, quizás si te sientas y hablamos…
-Señorita, yo…-intento explicar Marina. Yulia no supo evitarlo, y eso se debía a la rapidez con la que habían sucedido las cosas. Elena tenía la mano pesada y eso pudo comprobarse cuando la mejilla de Marina enrojeció tan rápido como la situación extraña que estaba presentándose.
-¡¿Y tu quien rayos eres?!-le grito-
-Marina-dijo Yulia socorriéndola- no sabes cuánto lo siento, en cuanto se aclare la situación ella va a pedirte disculpas. No sabes cuánto me apena esto-
-Siempre que vengo aquí recibo el mismo trato despectivo-dijo tocando su adolorida mejilla- pero esto fue el colmo-
-Estoy demasiado apenada, en serio-dijo Yulia totalmente desesperada- ¿Quizás podamos…?-
-Nada, aquí no sucederá nada-dijo cortándola- voy a marcharme de aquí y no volveré a pisar este lugar, no puede ser que sea agredida de ésta manera y encima por una confusión-dijo quitando los papeles de su escritorio- debes aclarar tus problemas antes de dejarlos entrar-guardándolo todo-y usted-mirando a Elena- debería preguntar antes de actuar, es una maleducada-
-Marina, espera-dijo Yulia siguiéndola. Elena comenzó a analizar mejor la situación y comprendió lo que acababa de hacer.
-Menos mal que aún no ha firmado nada-se alegro Marina- muchas gracias Yulia por éste…recuerdo-dijo antes de cerrar la puerta.
-¡Mierda, mierda, mierda!-grito golpeando la puerta. Elena avanzo lentamente unos pasos hacia ella
-Yulia, lo siento mucho, es que creí que…
-¡Tú!-grito girándose- Siempre supones y jamás preguntas ¿verdad Elena?-pregunto acercándose. La pelirroja retrocedió, Yulia apretaba sus puños y estaba muy enojada con razón- eres una de las pocas personas que saben que estoy hasta el cuello, vienes como si nada y me quitas la única migaja de esperanza que tengo para no caer directo al fondo-
-Es que yo pensé…
-¡Silencio!-y de igual manera arremetió como lo había hecho con Marina. Elena giro su rostro sintiendo como Yulia no tenia compasión por su golpe- en este mismo momento no me importan las estupideces que tengas para decir ¿es que no lo entiendes? ¡Me arruinas, Elena! Me arruinas completamente, ahora vete. Tu sola presencia empeora mi humor-
-Debemos hablar-dijo tocándose la adolorida mejilla-
-Ya veo-dijo sentándose- supongo que quieres volver a ser lo que fuimos, si es que alguna vez hubo algo-dijo- pero déjame decirte Elena que con esto mi decisiones se hacen más concretas ¿yo regresar? ¿Contigo? Eso ya no va-negando- sé lo que eres y no me agrada, ahora menos que nunca-
-Estás equivocada-contesto- no sabes cuánto te equivocas respecto a mi persona-
-Entonces finges ser todo el tiempo algo que no eres-suspirando- hagamos algo Elena, te hare una simple pregunta, solo una y si la sabes responder bien seré yo quien va a disculparse contigo y tomara las cosas con calma ¿estás de acuerdo?-pregunto. La pelirroja asintió esperanzada- es algo sencillo-parándose- ¿Cómo su llama su chofer?-
-¿Qué?-sin entender-
-El nombre de tu chofer-repitió- quiero que me lo digas-ordeno. La pelirroja observo sus pies y comenzó a hacer funcionar su memoria, se supone que es una pregunta sencilla que no tendría que estar pensándola durante mucho tiempo. Cualquiera habría respondido con rapidez ¿Por qué ella no? Recordó que su chofer hablaba con otros empleados, pero el nombre jamás llegaba a sus oídos. También el momento que lo había entrevistado cuando el llego pidiendo trabajo, pero su mente estaba jugándole una mala pasa. Levanto la vista y se encontró con sus ojos azules mirándola reprobatoriamente-no lo sabes-afirmo Yulia.
-No lo recuerdos que es diferente-contradijo-
-No lo sabes-repitió Yulia- ¿Entiendes eso, Elena? ¿Entiendes la pregunta y tu falta de interés por los que crees inferiores a ti? Es por eso que no puedo estar con una persona así, que empuja a todos a su paso, que siempre creer que los demás son menos. Necesito a alguien real, alguien que sienta y sepa ver lo que tiene en frente y sobre todo a valorar-
-Siempre se puede cambiar-admitió-
-Por supuesto que sí, pero tú no-dijo acercándose a ella- estropeas todo Elena y lo peor es que te niegas a aceptarlo. Y yo ya tengo más paciencia, y eso es gracias a ti. Ahora dejemos esto por paz y vete, acabas de quitarme una oportunidad y no sé hasta qué punto voy a controlarme-
-Yo podría ayudar…
-De ninguna manera-la interrumpió- no quiero deberte nada Elena, ya no quiero nada que me una a ti. Así que si no es mucho pedir-señalando la puerta-
-Seguimos teniendo tratos laborales por si lo olvidas-
-Lo hice simplemente porque eso iba a beneficiarme-confeso-
-También seremos familia-
-Suficiente-dijo llegando hasta a ella, sujeto a Elena del brazo y la arrastro hasta la puerta- no metas a otros en esto, es caer demasiado bajo-
-Voy a abrirte las ojos Yulia, y cuando eso suceda voy a estar esperando que admitas que eres tu quien está equivocada y yo tenía la razón- dijo sin titubear. Elena estaba ahora más segura que nunca de admitir sus razones: Yulia tenía que saber la verdad.
-Siempre tan decidida-dijo antes de darle un beso en la boca. Quizás era el último, así que cuando Elena quiso prologarlo Yulia ya se había apartado-adiós Elena-dijo abriendo la puerta-
-Hasta pronto Yulia-

Yulia estuvo unos cuantos minutos más en su oficina hasta que supo que ya no podía estar ahí. Aún seguía enojada por lo que había hecho Elena, ahora solamente dependía de las ganancias y Dios quiera que se vendan esas revistas.

LVI
ALGUIEN DEBE CEDER


Pecado…
…mira donde estamos ésta noche.



Yulia hubiera querido tener paz al regresar al penthouse, un tranquilizador silencio que le despejara la cantidad de problemas que se acumulaban en su cabeza. Pero definitivamente aquel no era su día. Completamente contrario a todo lo que deseaba era lo que estaba esperándola, la música fuerte llego a sus oídos en cuanto entro por la puerta. Sasha estaba bailando y se acerco hasta ella en cuanto la vio.

-Baila conmigo-dijo tomándola de las manos-
-Sasha, no. Estoy cansada-queriendo librarse-
-Vamos Yulia-la animo- como en los viejos tiempos ¿lo recuerdas?- Como olvidar aquella época en la que pensaba que todo era real-
-Es en serio-
-Ven-jalándola. Yulia recordó todos esos momentos en los que había invitado a Sasha a bailar de la nada, siempre habían tenido aquella clase de ocurrencias- ¿tan malo es para ti?-pregunto moviéndose-
-Solo ésta canción- anuncio justo cuando terminaba- Oh lo siento, solo era esa-
-¡No es justo!-abrazándola- al menos baila una conmigo-pidió. Para buena o mala suerte de Yulia, la canción siguiente era un tanto lenta. Ambas se miraron y se sonrieron a la vez- ¿aguantarías un lento?-
-¿Bromeas? Naci bailándolos-las dos rieron. Sasha se pego aún más a ella y cerro sus ojos dejándose envolver por la canción.


"Te amo, te amo" ella me dice
Oigo el dolor en su voz

Luego bailamos bajo la luz del candelabro,
ella toma la iniciativa.

Yulia torció la boca al escuchar la letra, le resultaba de repente tan incomodo el momento. Sintió que la rubia suspiraba y la abrazaba más fuerte, quizás sintiendo el mismo golpe de realidad al igual que ella.

Fue entonces cuando vi en sus ojos
se acabo.

Ella dijo "te amo"
y puso su mano alrededor de mi cintura.
Le digo "no”, ella lora "te amo"

-Yulia…
-Shhh-pidió en su oído- deja que al menos termine-dijo antes de hacer girar. Yulia evito a toda costa toparse con los ojos de Sasha, ella pego la mejilla en su pecho y sintió la humedad en su camisa.

Te dije que no saldría corriendo,
pero déjame ir.

Mi alma oye su llanto
"te amo, te amo"
ella está muy asustada para respirar.

Yulia cerró sus ojos ¿Cómo afrontaría ahora la situación? No podía creer como un simple baile y una canción estaban colocándola en esa posición tan incómoda. Quiso ocupar su mente en otra cosa y Elena fue todo lo que llego a ella ¿había estado mal en haberle pegado? Ella había interrumpido y arruinado su salvación del desastre, después de todo no era como si ella no hubiera aguantado aquello antes, pero no había razones para pagar con la misma moneda.
-Perdóname, Yulia-susurro Sasha en un sollozo.

Sostengo su mano,
no tengo elección

Ella me ruega
y me pregunta porque ha terminado

-Tranquila-responde acariciando su cabello. Seguramente Sasha ya lo sabe.
-¿Estaría mal?-pregunta Sasha observándola con los ojos rojos- ¿estaría mal si dijera que todavía siento cosas por ti, Yulia?-
-No, no estaría mal-responde con delicadeza- pero debes entender que las cosas no pueden volver, Sasha. Porque yo…
-No sigas-la interrumpe-por favor, no sigas-y el llanto sigue.
Yulia necesita aclarar su mente, colocar las cosas en su debido lugar para estar tranquila. Sasha levanta la cabeza y la besa, Yulia responde por simple inercia. La pregunta que se ha hecho mentalmente es respondida en ese mismo momento.


Entiendo que todos necesitamos amor,
y no me asusta sentir amor.

El beso sigue, pero no están y sabe que no volverán aquellas emociones en su estomago como hace tiempo atrás. Yulia sabe las razones, solamente que siempre ha estado negándoselas. Es momento de estar en paz consigo misma, necesita primero sincerarse y ver hasta dónde debe arriesgarse.
-Sasha-dijo apartándose- necesitamos hablar-parando de moverse-

Pero yo no me siento de esa manera.

* * * * *

REVISTA DE MODAS “ÍCONO”


-Señorita Katina…
-Ya te oí, Irina-contesto Elena bufando- cancélala, no estoy de ánimos ahora-responde finalmente.
-Vaya sorpresa- murmura anotándolo-
-Disculpa, ¿has dicho algo?-girando-
-Nada señorita-se apresura a decir- yo no he dicho nada-
-Bien-cruzándose de brazos. Elena vuelve a retomar la vista al gran ventanal, viendo de manera aburrida a los autos pasar-¿Cuándo dijo el señor Diatlov que vendría?-
-El aviso que llamaría por la tarde, si no era así dijo estaría aquí por la mañana temprano-contesto-
-Eso me da tiempo-hablando consigo misma- ¿Y el señor Keener?-
-Aún sigue de viaje-dijo- pero para la semana próxima estará aquí, dejo un mensaje dando las órdenes. Dijo que usted puede decorar las cosas a su gusto, el personal ya lo sabe-
-Perfecto-contesto- dile a Alphonse que esté listo cuando llegue, el me acompañara para ver eso. También avísale a Monique y consígueme una paisajista-ordeno-
-Entendido-anotándolo- ¿les digo alguna hora en especifico?-
-Solo comienza a avisarles en cuando me veas llegar, no sé cuanto pueda tardar Jean Pierre con las fotos-comento con un suspiro. Yulia seguro no iba a dirigirle la palabra y no era para menos, busco en su escritorio las llaves, sabía que con eso no iba a contentarla, pero siempre había una principio para cambiar.
-Señorita Katina-dijo Irina observándola- ¿está todo bien?-
-Eso quisiera, Irina-
Llego puntual al estudio de Jean Pierre, y aún así Yulia ya estaba presente junto a éste. Saludo apenas con un movimiento de cabeza y se coloco la ropa correspondiente y dejo que la maquillaran. En cuanto se vio frente al gran espejo entendió la idea del día.
-Así es, quiero que esas reinas sonrían-ordeno Jean- Gabriel encárgate de tomarles alguna de los rostros-
-Si señor-respondió-
-¿Qué tal una mejor sonrisa, Yulia? Así es, excelente-la felicito. Estuvieron posando unos cuantos minutos cuando Jean salió por un momento y volvió con un enorme trono con la ayuda de tres personas mas ¿de dónde lo había sacado? Nadie tenía idea- Yulia quiero que primero te sientes tu, Elena ponte a su lado y coloca tu mano en su hombro, exactamente así. Comienza Gabriel-ordeno- eso es chicas, sonrían. Elena quiero que te coloques en el apoyabrazos-volvió a mandar. Estuvieron así durante unos minutos cuando ordeno invertir los lugares- ya puedo imaginarme la portada-dijo sonriendo.

Las horas se extendieron y con ello se termino finalmente la sesión. Jean había quedado realmente satisfecho con las fotos y se lo había hecho saber varias veces a las chicas, Yulia se quedo hablando con el de cosas sin sentido y Elena entendió que estaba haciendo tiempo para evitar estar a solas con ella en el camerino, supo respetar aquello y fue en silencio a cambiarse. Resulto demasiado evidente cuando ella salió y Yulia ingresaba, Elena decidió despedirse de todos como si nada pasara y espero en la entrada del edificio.
Yulia suspiro cuando estaba llegando a la puerta, observo sus inconfundibles rizos rojos sabiendo de quien se trataba. Acelero el paso intentando evitar la fatiga, pero era estúpido pensar que se libraría tan fácil.

-Yulia, espera-escucho a su espalda. Sus pies la traicionaron y se clavaron en ese mismo instante- necesito decirte algo-
-Yo también-aclarándose la garganta- escucha Elena, con respecto a lo que te hice ayer…
-Eso no importa, después de haberte estropeado las cosas es lo mínimo que me merecía. Además yo lo he hecho contigo muchas veces, ni siquiera puedo decir que estamos a mano-
-Pero aún así no tenía ningún derecho, no controle mi enojo y…
-Olvídalo-dijo poniendo en sus labios- es en serio Yulia, ya olvídate de eso. Si te sientes culpable estas disculpada-dijo- aunque hay algo que quiero darte, lo siento mucho-alcanzándole unas llaves-
-¿Y esto?-tomándolas-
-Son llaves-respondió medio sonriendo.
-Sí, lo sé-dijo- ¿Pero de qué?-
-De eso-señalando con su cabeza. Yulia giro y se encontró con un jaguar negro. Exactamente igual al que tenia, aquel al que Elena le había destruido-
-¿Es lo que yo creo que es?-
-Si crees que es para ti, entonces sí. Es exactamente eso-respondió-
-Lo siento, pero no. No puedo aceptarlo-intentando de devolverle las llaves-
-Yo destruí tu auto ¿lo recuerdas? Es lo que menos puedo hacer-cruzándose de brazos- lo tomas o lo tomas-
-No hay opciones ¿eh?-pregunto- está bien, ya que insistes. Solo te diré una cosa Elena, esto no cambia nada-aclaro. Aunque la pelirroja estaba preparada para eso, no podía evitar sentir el dolor que producían sus palabras.
-Lo sé-murmuro taciturna.

Luego de aquello no volvieron a encontrarse por unos cuantos días. Yulia aún estaba preocupada por la imprenta, el contrato finalizaría unos días después del comienzo de la primera y estaban a nada de eso. Iba a recibir las ganancias de la revista para esas fechas, pero si no conseguía quien se la fabricara estaba en serios problemas. Y para echarle mas conflicto al asunto, también estaba la empresa de su padre que requería de muchas atenciones. Daba las gracias de que tuviera ayudantes, su madre tenía, no podía con todo y era ahora que veía la situación más estrecha.

Elena mientras tanto había decidido concentrarse en su próximo desfile, las cosas llegaban a ella al alcance de su mano e iba a hacer todo lo posible para sacarle provecho. Tenía todo a su disposición y eso facilitaba muchísimo las cosas, todos estaban a la expectativa de la apertura de primavera y nadie mejor que ella para sorprenderlos.

-Esto ha quedado magnifico, Elena-comento Boris observando el lugar- a Polina va a encantarle, estoy seguro-
-Cualquiera que disponga de buen gusto pensara igual-comento- estoy contando las horas para el comienzo de la nueva temporada, no hay mejor forma de empezarlo-
-No lo dudo, querida-riendo- con tu talento cualquiera estaría igual, hasta yo estoy ansioso por verlo y eso que ya me has contado todo detalladamente-
-Yo también, solo falta que las modelos hagan su trabajo y que todo salga como lo espero-
-Ya verás que si-la tranquilizó- de todas maneras te deseo la mejor de las suertes Elena, aunque sepa que no son necesarias-
-Gracias, Boris-respondió- espero que todo salga perfecto-

* * * * *


-¿Y qué piensas hacer?-pregunto Aleksei mirándola con atención-
-No tengo opciones Aleksei, hasta siento que solo ha venido aquí para avisarme. No puedo negarme, no puedo arriesgarme a dar un mal paso y encima ser yo la causante de eso-comento suspirando. Jean Pierre había apareció avisándole que la revista seria lanzada el mismo día que el desfile de Elena, la prensa esperaba hacerle algunas preguntas, y obviamente para ello, debían estar juntas. Si ella pensaba que ahí iba a terminar todo con la pelirroja, estaba demasiado equivocada.
-Pues no tienes escapatoria-comento sonriendo- ¿Qué es lo peor que podría pasar, Yulia?-pregunto- sinceramente yo siento que si lo sabes y lo niegas-caminando hacia la puerta- piensa, porque no lo estás haciendo con claridad-aconsejo antes de marcharse.


Aquella mañana, que venía junto con la llegada de la primavera, avisaba de antemano que el día iba a ser maravilloso. El sol estaba radiando y parecía llenar de más energía a las personas que terminaban con los últimos preparativos de aquel evento tan aclamado y esperado.
Elena estaba dándose los últimos retoques cuando su madre apareció detrás de ella.

-¿Esto está bien? No quisiera estar fuera de lugar, más cuando mi hija es Elena Katina-dijo bromeando-
-Madre, estás perfecta-observándola- busca tu bolso, necesito estar ahí para ver cómo van las cosas-
-¿Y cuando almorzaremos?-
-Lo haremos allá, podríamos encargar algo o luego veremos, no lo sé-contesto justo cuando su celular comenzó a sonar- debemos irnos-anuncio observando el mensaje.

Inessa tuvo la oportunidad de ver en vivo a su hija en acción, Elena daba las órdenes con total seguridad y eso no hacía más que inflar su pecho de orgullo. Su retoño había nacido para eso.
Se habían pasado prácticamente toda la tarde ahí, cuando el sol estaba a punto de caer y las cosas ya estaban terminadas, Inessa se sintió afortunada de estar en un evento de ese nivel.

-Lena, cariño, todo esto es magnífico-dijo encantada. Las luces se encendieron y todo era aún más alucinante- estoy tan orgullosa de ti-
-Gracias, mamá-respondió. Su madre la abrazo con fuerzas y le sonrió.
-Señorita Katina, ya es momento. Las personas comienzan a llegar-anuncio un joven-
-Perfecto, estén atentos-pidió.
Los siguientes minutos no habían hecho más que saludar a las personas. Eso incluyendo a Milenka Serkin, quien había tenido la osadía de asistir como si fuera una más del montón.
-Por lo que veo le has puesto mucho esmero Katina-menciono observándolo todo- esperemos que nada se estropee, sería denigrante para ti ¿no? Al fin todos verían tu incapacidad para esto-
-Si no la tuviera no me lo hubieran ofrecido a mi ¿cierto?-pregunto- que lastima Milenka, darte cuenta que ya ni siquiera lo logres acostándote con todos los diseñadores que te cruces-
-Controla esa boca-advirtió- y cuídate la espalda Katina, todo puede suceder-menciono antes de alejarse-
-Pero que jovencita más…horrible-menciono Inessa sorprendida-
-Y eso que no conoces su historial-

* * * * * *

-Estás siendo demasiado inmaduro ¿lo sabes?-
-Tengo a mi novia embarazada ¿Qué quieres que haga?-respondió-
-Que dejes de meter excusas-dijo- porque sé que esa no es la verdadera razón-
-¿Sabes que, Yulia? Tienes razón, no estoy ahí contigo porque ya te advertí que era ella o yo. De todas maneras debes estar muy bien acompañada ¿me equivoco?-
-Adiós Aleksei-dijo colgado-
-¿Está todo bien, Yulia?-pregunto Sasha entrelazando sus brazos-
-No, mi hermano jamás piensa madurar. Entremos de una vez-suspirando-

Yulia tenía una leve idea de la cantidad de personas que seguramente asistirían, y teniendo en cuenta que habían sido demasiado puntuales, el lugar estaba tan repleto que sentía que el oxigeno ya no era suficiente. Observo toda la decoración y demás detalles sonriendo, no esperaba menos. Todo estaba perfecto.

-¡Yulia!-escucho a su espalda. Giro encontrándose a Polina sonriendo- que bueno encontrarte ¿no te parece genial todo esto? Elena ha hecho un excelente trabajo-
-Eso veo-observando a su alrededor-
-Déjame felicitarte por la revista, están todos maravillados por ella-
-Gracias, Polina-
-Todos quieren la exclusiva, que genial que compartan juntas este tipo de cosas. Por cierto, hace unos días estuve hablando con Valeriya, quizás esté visitándonos dentro de unas semanas-
-¿En serio?-pregunto sonriendo- estaré esperando entonces, aunque no dudo que me avise cuando esté a punto de llegar-
-Eso mismo pensé yo, siempre fueron tan unidas. Me da gusto que se involucre con gente como tú, se que aprende muchas cosas de ti esa niña-
-Polina, deja de retener a Yulia-dijo Boris llegando- ¿Cómo estás?-
-Excelente Boris, no podría estar de otra manera-
-Me alegro-dijo- Elena me ha enviado a buscarte, sus lugares ya están reservados ¿me acompañas?-
-Bueno, es que yo…-mirando a Sasha-
-Solo tú Yulia, tienen lugares especiales-dijo Boris sin entender nada de la situación-
-¿Podrías encárgate de conseguirle un lugar a Sasha?-le pregunto a Polina-
-Por supuesto que sí-contesto ésta. Yulia sabía lo que tramaba la pelirroja, así que sin más protestas decidió seguir las reglas.
-Esto no tarda en comenzar-menciono Boris a su lado.

En cuanto llegaron a su lugar Elena tenía una cara de satisfacción en su rostro, había tenido que posar con ella para algunas fotos y luego tomaron asiento. Observaron la apertura en primera fila, y el desfile llego, cumpliendo mucho más que las expectativas de todos.
No hubo errores ni malos momentos, Elena con esto volvía a tener el merecido primer lugar que disfrutaba tener. Para alegría de muchos, y disfruto por parte de su competencia, sería difícil sacarla de donde estaba. El público aplaudió de pie al final y los flashes volvieron a retomar en dirección de ambas.

-¿Puedo hacerle algunas preguntas a ambas?- dijo un hombre acercándose. Ambas asintieron y respondieron de manera paciente cada pregunta que se les hacía.
-¿Habrá una fiesta al finalizar?-pregunto Irina observando que Fiodor no le quitaba la mirada a la pelirroja desde lejos.
-Por supuesto que sí-respondió sin mirarla- y no me la perdería por nada en el mundo-
-Eso quiere decir que te quedaras-afirmo-
-Sí-respondió distraído. Irina suspiro sintiéndose inútil, Fiodor estaba demasiado distraído como para notarla.
-Les agradezco mucho que me dieran un poco de su tiempo-
-No fue nada-respondió Yulia. El hombre se fue satisfecho.
-Tendremos otras en la puerta más tarde, debemos estar juntas-
-Avísame cuando nos necesiten- Elena la sujeto del brazo-
-Dije que debemos estar juntas-
-Y yo dije que me avisaras-apartando su brazo- no tengo ninguna obligación contigo-
-¿Por qué haces esto, Yulia?-
-Tú lo complicas todo-respondió antes de irse.

Elena se quedo con la mirada perdida. Aún así, observando a través de la gente, observo como Yulia iba directamente hacia donde estaba Sasha. Apretó los puños la cansada y dijo que esa misma noche, lo recuperaría todo. Cueste lo que cueste.

-Aquí estas-menciono Sasha sonriendo-
-Aquí estoy-respondió- ¿Qué te pareció todo?-
-Yulia fue todo alucinante, gracias por traerme-
-De nada-respondió- ¿quieres algo de beber?-
-¿Ya no te van a necesitar?-
-Creo que por el momento no, tendré una entrevista más tarde ¿Por qué lo preguntas?-
-Entonces tendremos tiempo-respondió- ¿sabes cuándo será tu entrevista?-
-La verdad no tengo idea-
-¿sabes donde están los vestidores?-pregunto de repente-
-Por supuesto-dijo confundida- ¿Por qué?-
-Porque tengo una magnífica idea-menciono acercándose a ella. Sasha susurro algo en su oído que dejo a Yulia con la boca abierta de la sorpresa.
Fiodor vacio su copa y supo que ya era el momento. Avanzo hacia Elena justo cuando vio que el hombre de traje la dejaba y ella quedaba a su entera disposición
-Elena ¿Podemos hablar?-pregunto cauteloso-
-¿Es importante?-pregunto cansada-
-Para mí si-respondió- y mucho-
-Está bien-
-Acompáñame, por favor-pidió educadamente. Fiodor la llevo hasta un lugar bastante apartado de la gente, en realidad había salido afuera y no se detuvo hasta que noto que nadie más podía observarlos.
-¿Es necesario irnos tan lejos?-pregunto detrás de él.
-Lo hice por ti-respondió girándose- Elena hay algo que debo decirte, me he dado cuenta hace tiempo y la verdad es que ya ni siquiera sé por dónde empezar-
-¿Estás abrió?-pregunto viendo que se sostenía con la pared. Fiodor la acorraló y ella se aplasto contra la pared tomando la mayor distancia posible- Fiodor…
-Eso es lo que menos importa ahora ¿está bien?-menciono- quizás lo esté, pero eso no significa que lo que vaya a decir es producto de eso. Elena debes saber que yo estoy enamorad…
-No lo digas, por favor no lo digas-lo interrumpió-
-¿Qué no lo diga?-pregunto confundido. Observo sus labios rojos- entonces déjame demostrártelo-acercándose-
-Detente Fiodor-dijo apartándose- ¿Qué estás haciendo? Lo que dices es… no es posible. Es que yo pensé quera eras…
-¿Gay?-completo riendo-
-Así es-respondió- es que jamás he conocido que tengas pareja, nunca hablas de alguna mujer y siempre estás solo-
-Eso es porque siempre he tenido ojos para una-colocando un mechón de pelo detrás de su oreja- al principio quería convencerme de que era simple admiración, pero veía a la mujer que te has convertido con los años y no he podido evitarlo-
-Estás mal, Fiodor-dijo negando- por más que lo que digas es cierto, sabes que no puede ser-
-Lo sé-triste- simplemente quería que lo supieras. Ya no podía callar esto-
-Lo siento-mirándolo a los ojos- eres una buena persona, pero yo…-
-Estás enamorada-completo el. Elena abrió la boca para contradecir eso, pero las palabras no salieron- y si no lo estuvieras se que tampoco te fijarías en mi. Solamente quiero que sepas, que para lo que quieras, yo voy a estar para ti-
-Gracias-sin saber que decir- pero no crea que lo que digas sea del todo cierto-
-Eres diferente-afirmó- desde hace tiempo lo estás, y envidio mucho a esa persona. Espero que sepa hacerte feliz, que te de lo que mereces-
-¿Cómo puedes estar tan seguro?-pregunto- tampoco es que me conozcas tanto-
-Lo hago-respondió seguro- creo que muchos lo han notado, eres tú quien no lo sabe aún. Estoy diciendo esto desde el fondo de mi corazón Elena, que te pertenece, si esa persona te hace sufrir, no respondo de mí-
-Muchas gracias, Fiodor-respondió sincera- siento no poder darte lo que quieres-
-No importa, aprenderé a vivir con ello-sonriendo débilmente-
-Aunque no deberías buscar la felicidad donde sabes que no vas a encontrarla-menciono. Elena camino unos pasos y Fiodor la siguió en silencio, llegaron hasta una ventana y ella se aparto para que observara- mira allí-señalando hacia adentro. Los ojos azules de Fiodor se agrandaron cuando observaron a Irina hablando con alguien adentro-
-No estarás hablando en serio-
-Puede que no aparente ser la más observadora, pero también se notar ciertas cosas-tocando su hombro- solo date una oportunidad Fiodor, así como lo estoy haciendo yo. Veras que no te arrepentirás, por mi cuenta corre. Sé que también lo sabes al igual que yo-

Elena dejo a Fiodor solo para que meditara a solas, sinceramente creía en la posibilidad de una declaración, pero no esperaba que fuera tan directo. En cuanto estuvo adentro se contagio por la música, las personas lucían alegres y ella podría decir que estaba completamente satisfecha, si no fuera por una sola cosa.
Busco con la mirada lo único interesante para ella aquella noche, busco una copa y no dejo por un instante que nada la distrajera.

Interesante sentido de la moda,
sonrisa de diez millones de dólares.

Creo que puedo manejar
a ese animal en la cama.

Yulia busco a Sasha con la mirada, la música apenas dejaba escuchar un murmullo lejano de todas las personas juntas. Ni siquiera había notado cuando la había perdido de vista, si tan solo hace un momento estaba a su lado. Sintió una mirada sobre ella y se encontró con unos ojos verdes chispeantes observándola, sostuvo la mirada porque era eso exactamente lo que quería hacer. Siempre habían sabido comunicarse con la mirada.

Sus ojos ven directamente mi alma.
Píllame mirándote otra vez,
cayendo directamente en mi plan.

Y eso es lo que quiero.
Estoy tratando de hacerte entender
que estás en mi radar.

Giro sobre sus talones y decidió seguir con su búsqueda, no estaba segura de controlar lo evidente que había visto. Trago pesado cuando supo descifrar su mirada. Observo su celular y noto que tenía un mensaje de Sasha. Estaba esperándola donde dijo que iba a estar.

Escogiéndote,
no quiero perderte.

Tengo el cosquilleo
que quiero mezclar.

Me pregunto si sabes
que estás en mi radar.

Yulia primero se encargo de ver que nadie la estaba viendo, y escurriéndose hábilmente, fue a parar detrás de la pasarela. Era evidente que las modelos se habían ido hace tiempo, así que dejo la preocupación de verse vista y busco la puerta que la llevaría a la privacidad que quería. En cuanto la encontró no dudo en meterse, las luces estaban apagadas y decidió dejarlas así. Encontró un sofá y decidió esperar. Aún Sasha no llegaba.

No creo que sepas,
te estoy observando tan ardiente.

Estás en mi radar.

Estuvo esperando unos cuantos minutos paciente cuando escucho la puerta abrirse y cerrarse al instante. Se paro rápidamente y fue al encuentro de su acompañante, quien la beso apenas la supo tocar con las manos. Yulia no supo explicarse cual fue el verdadero hecho, pero sentía aquellas labios demasiado diferentes y su pecho estaba ardiente y crecía con más intensidad a medida que escucha su propia respiración agitada.
Abrazo al esbelto cuerpo y la ayudo a montarse sobre una mesa, la música se escuchaba a los lejos y cada vez estaba siendo más opacada por los gemidos de la otra mujer, besaba su cuello con hambre y sus manos parecían tener vida propia.

Yulia encontró el vestido corto y comenzó a levantarlo, sus manos hervían por tocar su suave piel. La mujer se abrió para ella y una mano busco lo que tanto quería. La morena estaba a punto de penetrarla cuando sintió que ella también estaba levantando su vestido, no tuvo ningún impedimento con eso y dejo que hiciera lo que quisiera con ella.

-Cielos…-jadeo Yulia cuando la sintió. Sus dedos también se enterraron en el interior y ellas gimieron juntas rompiendo el silencio de la habitación. Agacho su cabeza y busco sus labios que fueron recompensados con un beso desesperado. El movimiento en el interior de ambas no se hizo esperar, las exhalaciones rápidas por la nariz se repetían más fuertes y sus bocas no se despegaban.

-Mi Dios-la escucho decir. Yulia intento esforzar su vista y noto que la mujer dejaba expuesto su cuello, fue hasta él y no tuvo cuidado en no dejar una marca. Su piel estaba demasiado suave y parecía llamarla a gritos. Yulia comenzó a mover las caderas y supo, por las contracciones de su cuerpo, que no le faltaba mucho. La mujer pareció saberlo y comenzó a apresurar sus movimientos, la morena se quedo estática en su lugar y dejo que el orgasmo la arrasara, quitándole las fuerzas.

-Eres grandiosa-la felicito Yulia cuando recupero el aliento. La mujer quito cuidadosamente su mano y la tomo por la nuca para que se acercara a besarla. La morena retomo los movimientos con su mano y busco los voluptuosos senos que sentía bajo su torso. La mujer comenzó a retorcerse dejaba de ella cuando sintió sus labios sobre la tela, fue ella misma quien bajo su vestido como pudo y dejo que sus labios estuvieran en contacto con su piel.
Yulia se esmero con la lengua sobre el pezón endurecido, sujeto su muslo con la mano libre cuando la sintió temblar. Escucho su jadeo rápido, y después, ella también se dejo llevar.

Estuvieron quietas hasta que ella comenzó a respirar normalmente. Yulia la ayudo a pararse y acomodo su vestido en la oscuridad. La mujer volvió a abrazarla y fue entonces que la morena se había percatado de su cabello. Unos rizos bien formados se enredaban en sus dedos. Su corazón latió y se quedo en su lugar cuando la luz fue abruptamente encendida.
La mirada de Elena estaba fija en sus ojos y brillaban con mucha intensidad. Sasha estaba parada en la puerta observándolas sorprendida, sus labios con pintura corrida y los vestidos mal acomodados hablaban por ellas.

-Yulia…-murmuro la rubia con lágrimas en los ojos. Elena sonrió triunfante cuando vio su dolor. La venganza era hermosa. Sasha no espero un segundo más ahí y salió corriendo tan rápido como podía. La morena no se explicaba cómo es que aún no se había podido mover de su lugar, Elena la apretó contra su cuerpo logrando que la mirara y le sonrió sinceramente antes de darle un rápido beso.

-Tú sabías que eras yo-afirmo con alegría-

Wow por finnnnnn, que bueno es volver a leerte, como siempre genial y cono ganas de más...
Pei, que gran talento felicitaciones; y una preguntita, también publicarás tu otro fic acá? (Mentiras), también estaba muy bueno...

Mmmm ok, encantada, fascinada, enamorada, uuufff pero que historia tan magnifica, te provoca todas las emociones a la vez, maravillada con cada letra... Y ese toque final? Elena definitivamente es Wow! de armas tomar y una habilidosa como me encanta de verdad, adoro este fic *-* muchas gracias Pei por esta sorpresa, por cierto Feliz cumpleaños

Jajajaja genial! Buena lena ojala asi sascha desaparezca d una vez y no complique mas las cosas y yulia q no se haga q bien que queria

Feliz cumpleaños Pei pasa tu día genial te envió besos y abrazos

Te felicito valió la pena la espera gracias por regalarnos estos tres excelentes capítulos saludos!!!

al fin actualización y que actualización!!!!!
me han encantado todos los capítulos ha estado excelente !!!
lo unico negativo a sido que lo has dejado en la mejor parte !!! pls no demores en actualizar amo este fic !!!

Esta buenisimo, esta elena pelea por lo suyo, ya volkova perdone a lenaaa

Me encanta la forma en que escribes todo tiene una perfecta redacción....porfa no tardes en actualizar de verdad me encanta tu historia